En un mundo en que la sastrería es prácitcamente innecesaria y uno puede vestirse donde quiere, el concepto de artesanía toma más relevancia.

Ya no se trata de hacer ropa. Se trata de personalizar cada detalle, buscar relevancia en lo contemporáneo y una obra de arte que el cliente se pueda poner. Se trata de pasión y constante afán de superación. Por hacer un traje más ligero, un forro más delicado, de elevar la confección a una forma de arte.

Tratamos de, respetando la tradición, no olvidar la modernidad, y hacer prendas relevantes para el mundo en que vivimos. Esa es la gran visión de Joaquín Fernandez Prats: Hacer de este oficio ancestral algo perfectamente actual.